“Estamos convencidos de que la inteligencia artificial va a influir ya no solo en la economía del país, sino en la forma en la que nos relacionamos como sociedad”. Con esta frase, José Luis Escrivá, ministro de Transformación Digital y Función Pública, ha anunciado la aprobación de la Estrategia de Inteligencia Artificial durante la rueda de prensa posterior al tradicional Consejo de Ministros de los martes.
Aunque ya lo había adelantado el pasado jueves durante la séptima edición del AMETIC Artificial Intelligence Summit 2024, Escrivá ha explicado las ocho palancas en los que estará basada la nueva Ley de Inteligencia Artificial. El objetivo es desarrollar “una IA humanista, que incorpore valores éticos en distintos elementos centrales”.
La primera palanca tiene a la supercomputación como eje. Desde el Gobierno “se va a reforzar la supercomputación”, un área, en la que, según Escrivá, “España está muy bien preparada”, gracias al Centro Nacional de Supercomputación situado en Barcelona (BSC). “Vamos a destinar 90 millones de euros para construir el MareNostrum Plus”. Asimismo, el ministro ha anunciado que también se va a reforzar “la red española de supercomputación”.
La segunda de las palancas buscará hacer más eficientes los centros de datos. “Estamos trabajando con el ministerio de Transición Ecológica” para crear unos estándares de sostenibilidad. Además, el Gobierno va a “desplegar fondos de recuperación” en empresas “que ayuden a desarrollar soluciones de inteligencia artificial” desde un punto de vista eficiente.
La tercera palanca se centra en la creación y expansión de una familia de modelos de lenguaje en castellano y lenguas cooficiales que se llamará ALIA, cuyos primeros resultados estarán disponibles al final del verano. Estos modelos, que tendrán más de un 20 % de entrenamiento en castellano y lenguas cooficiales, frente a menos del 5% de los modelos actuales, permitirán reducir los sesgos y mejorar las aplicaciones prácticas que las empresas y administraciones de nuestro país pueden desarrollar.
El fomento del capital humano de la inteligencia artificial es la cuarta palanca de la nueva Estrategia de Inteligencia Artificial. “El talento” en esta área “va a ser escaso”, con lo que “tenemos que promover la capacitación” a través planes de becas y ayudas. Así, la Estrategia impulsará la creación de redes y la búsqueda de sinergias entre los proyectos que ya están en marcha y que han supuesto una inversión de 600 millones de euros. Además, invertirá otros 160 millones más en becas, Formación Profesional y formación de docentes.
La quinta palanca tiene al uso de la inteligencia artificial en las Administraciones públicas como eje. “En el ámbito público se dan las mejores condiciones para poner en marcha casos de éxito o de uso”, ha destacado Escrivá. “Estamos trabajando en una norma para la gobernanza de los datos” que impulse la inteligencia artificial en las AA.PP.
Para promover el desarrollo de la IA en el sector privado (sexta palanca), especialmente en el ámbito de las pymes y autónomos, se desarrollará el programa Kit Consulting, dotado con 300 millones de euros, para que los proyectos empresariales de menor tamaño puedan contratar servicios de asesoramiento para la adopción de la IA. Además, se ha ampliado el programa Kit Digital con la incorporación de nuevos productos IA y una inversión de 350 millones. También se dedicarán 400 millones de euros a través del Fondo NextTech con el objetivo de facilitar financiación a las empresas que desarrollen soluciones de IA.
Las dos últimas palancas se centrarán en los ámbitos de la ciberseguridad y el desarrollo de una inteligencia artificial “ética, responsable y humanista”. En el caso de la ciberseguridad, José Luis Escrivá ha recordado que “no hay usos de instrumentos digitales si no va acompañado de ciberseguridad”. Para garantizar un entorno de desarrollo seguro se está trabajando “en una ley integral que se anticipe a los problemas de seguridad” y que “fomente la innovación, la colaboración y la adopción de tecnologías de IA en el ámbito de la ciberseguridad”.
Por su parte, el desarrollo de una IA “ética, responsable y humanista” correrá a cargo de la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial (AESIA), que actuará en una triple dirección: como centro de pensamiento y análisis sobre la IA, como supervisor de un despliegue responsable de la IA y como referente internacional.