Si contar con una estrategia adecuada de transformación del puesto de trabajo siempre se ha tornado esencial para asegurar una excelente productividad empresarial; disponer de ella en una época de crisis, como esta, marcada por la obligatoriedad del teletrabajo por las medidas decretadas para detener al Covid-19 es vital. Liferay asegura que disponer de ella puede marcar la diferencia entre seguir o no manteniendo la productividad empresarial. “Debe ser una prioridad”, asegura Carolina Moreno, vicepresidenta de ventas para EMEA y directora general para el sur de Europa de Liferay. “Permite coordinar equipos separados, facilita la conciliación y permite hacer frente a cualquier tipo de crisis, en los que el trabajador tendrá que enfrentarse, además, a un entorno doméstico más complejo, compartiendo espacios con su familia o viéndose obligado a flexibilizar su horario de trabajo para cuidar de menores o mayores”, recuerda.
Liferay recuerda las cinco capacidades que deben cumplir estos espacios digitales. Es esencial que cuenten con capacidades de gestión de contenido y colaboración que permitan crear bases de conocimiento, facilitar la creación y el intercambio de contenido, así como la colaboración departamental e interdepartamental a través de sistemas de videoconferencia, chats, foros de discusión o wikis colaborativas. “Es imparable la manera en la que la transformación digital está cambiando la naturaleza de los espacios de trabajo”, recuerda Moreno. “La supervivencia de los negocios dependerá, en gran medida, del éxito de los equipos de trabajo y de las herramientas que utilizan”, insiste. “Tener espacios de trabajo digital avanzados será un aliado fundamental frente a cualquier situación”.
Estos espacios digitales no deben olvidar que hay que cuidar la personalización de la experiencia del empleado, que además será una herramienta muy útil para facilitar la localización de la información, reduciendo tiempos de búsqueda e incrementando la productividad.
Es clave la gestión de accesos a la información basado en roles y perfiles, lo que, primero, permitirá mantener un sistema de seguridad y, segundo, definir políticas para determinados usos, situaciones especiales o crisis.
Los contenidos, siempre claves, cuentan con un motor para facilitar su búsqueda, lo que agiliza el acceso a aquellos que se necesiten, así como para ordenarlos o para personalizar las clasificaciones de los resultados.
Por ultimo, la integración de ecosistemas es fundamental: todas las herramientas deben estar integradas con el resto de los sistemas operativos. Es el camino para ofrecer una experiencia unificada al empleado.