El cibercrimen se apoyará, el próximo año, en la inteligencia artificial avanzada y el contra inteligencia artificial. Los expertos en ciberseguridad de Fortinet han desvelado las posibles amenazas que llegarán en 2020. El análisis, FortiGuard Labs, prevé los métodos que utilizarán los ciberdelincuentes y las estrategias que las empresas deben seguir para protegerse.
“Gran parte del éxito del cibercrimen se ha debido a su capacidad para aprovechar la superficie de ataque en expansión y las consiguientes brechas de seguridad producidas durante el proceso de transformación digital”, ha explicado Derek Manky, chief security insights & global threat alliances en Fortinet. “Sus metodologías de ataques se han vuelto más sofisticadas al integrar los precedentes de la IA y la tecnología de enjambre”, ha añadido.
En este sentido Manky ha comentado, “afortunadamente, este modelo está a punto de cambiar en la medida en que más organizaciones protejan sus redes aplicando el mismo tipo de estrategias que los delincuentes están utilizando para atacarlas”. El directivo ha finalizado explicando que “esto requiere un enfoque unificado que sea amplio, integrado y automatizado, que permita la protección y la visibilidad en todos los segmentos de la red, así como en varios perímetros, desde IoT hasta las nubes dinámicas”.
Fortinet engloba sus predicciones bajo dos premisas: por un lado, la trayectoria de los ciberataques está cambiando y, por otro lado, la sofisticación del cibercimen no se ralentiza.
- La trayectoria cambiante de los ciberataques: los ciberataques han aumentado su eficiencia y velocidad en los últimos años. El volumen, la velocidad y la sofisticación de las amenazas actuales obliga a las organizaciones a ser capaces de responder en tiempo real. Los avances en inteligencia artificial y en inteligencia de amenazas serán vitales en esta lucha.
- La sofisticación de los ciberadversarios no se ralentiza: para el cambio de estrategia se necesita la respuesta de los ciberdelicuentes. Las técnicas avanzadas de evasión, la tecnología enjambre, el armamento 5G y Edge computing y el cambio en el uso de los ataques influirán en esta sofisticación de los ciberdelicuentes y sus ataques.