Tal y como Nicolás Rodríguez, CXO Adviser señala, entre las preocupaciones del CIO y del CISO, intentar detectar y prevenir amenazas. Proporcionar una forma segura de acceder a todos los recursos, con independencia del dispositivo que utilicen y del lugar en el que se encuentre. Y prevenir la fuga de datos y de información confidencial. Una vez superada esta primera fase seguirán teniendo problemas, manifiesta, más enfocados a la visibilidad y control de todo lo que ocurre en la red ya que esta se ha convertido en un activo crítico para el desarrollo de las operaciones de control. Esto, en su opinión, tiene que redundar en una excelente satisfacción del usuario porque, reconoce, hay que dar seguridad pero sin dificultar el desempeño cotidiano de las actividades de una empresa.
Entre las preocupaciones de ambas figuras directivas también se encuentra la integración completa entre las soluciones para tener una visión holística de la seguridad, así como mejorar el rendimiento y la escalabilidad. Y una vez conseguido todo ello, contar con capacidades analíticas e informes que ayuden en la toma de decisiones, buscando una solución de seguridad que acompañe a la organización.
Miguel Ángel Martos, country manager de Netskope Iberia, pone en valor las soluciones de la compañía al señalar que intentan ayudar a conseguir allanar a CIO y CISO el camino para alcanzar las metas señaladas por Nicolás Rodríguez como la simplicidad de su tecnología, el cumplimiento normativo y la innovación tecnológica, aportando, además, velocidad y cambio de rumbo en cuando surge un problema. Para ello Netskope trabaja en dos grandes líneas tecnológicas relacionadas con la simplificación y con la mejora de la experiencia del usuario. La simplificación viene de la mano de su plataforma Netskope One que evita el malware y el robo de información.
“Netskope One es la implementación de una política que se basa en disponer de una única red. Desde el punto de vista de un operador o de una compañía, sustituir la seguridad en la nube por una única red en todo el mundo y para todos los clientes”, asegura Martos. “Nosotros podemos aplicar esas políticas, los elementos de control”, enfatiza. Así, la primera gran aportación de Netskope ha sido unificar ese agente. Una única política unificada para todos los elementos, que se implementa una vez y se aplica en todos los canales que la compañía quiera proteger: email, puesto de trabajo, endpoint…
No podemos olvidar otra de sus fortalezas: para que la experiencia de usuario sea excelente la red tiene que tener una cobertura geográfica total. Netskope tiene cubiertas 75 áreas geográficas, con puntos de presencia y capacidad de simular un entorno de navegación en cualquier país del mundo, aunque no tengan un punto de presencia local. “Construimos nuestra red en puntos neutros de Internet y esto nos permite controlar la experiencia de usuario. Además, contamos tres puntos de presencia: uno en Barcelona y dos en Madrid. Estamos abriendo un cuarto nudo en la Península Ibérica, en Portugal”, avanza.
El crecimiento en España en los últimos dos años es notable, remarca el directivo. En nuestro país ya cuentan con casi un centenar de empleados. Un crecimiento que indica la oportunidad que presenta España a la hora de desarrollar y aportar conocimiento para el resto del mundo, alega, al tiempo que están apostando por Portugal, lugar que esperan que sea otro de sus focos importantes. Cataluña también se ha revelado como un lugar fundamental, con el nodo de Barcelona, abierto hace unos meses. Todo ello junto a la Administración pública y el canal, también fundamentales.