La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá y el presidente de AMETIC, Pedro Mier, han firmado esta mañana un acuerdo de colaboración que impulsará las competencias digitales en la FP. Acuerdo por el que se estable la revisión y actualización de forma permanente de los títulos de FP relacionados con el sector tecnológico y digital. Un protocolo de intenciones que durará cinco años, extensible a dos más.
Un logro muy importante, tal y como ha destacado Mier, si tenemos en cuenta que el primer problema del sector y del país es encontrar los perfiles adecuados que demanda el mercado. En su opinión, el reto pasa por tener la capacidad para preparar, cualificar y recualificar las necesidades educativas. Si bien este no es el primer acuerdo que se firma desde la patronal en el ámbito educativo. El presidente de AMETIC ha recordado que anteriormente habían llegado a otro acuerdo con sindicatos y administración.
Necesidades a cubrir en la FP
Por su parte la ministra ha remarcado el principio de amistad que se está poniendo en marcha entre la asociación y el ministerio, para la FP porque, en su opinión, está claro que la empresa tiene que estar en todo el proceso y la colaboración público-privada es de suma importancia para la FP.
Así, entre la demanda que habrá de personas que trabajen en empleos que todavía no existen y un país que necesita ser más competitivo, ambos protagonistas han señalado la necesidad de que los profesionales de todos los sectores adquieran competencias digitales para dar respuesta a la transformación tecnológica empresas e industrias están desarrollando en todos sus procesos. Y más cuando en un futuro tan solo el 14 % de los empleos estarán destinados a personas con baja cualificación, cifra que en España se eleva a algo más del 37 %, razón por la que hay que elevar este nivel de cualificación.
Celaá considera, por otro lado, que este acuerdo les va a permitir revisar muchas cuestiones con la vigencia de los ciclos formativos. Desafíos como una escasa oferta de ciclos de FP que dependen de las comunidades autónomas, que hay que impulsar o la colaboración por parte del ministerio en el diseño de programación del profesorado, por poner algunos ejemplos.