La solución de Gemalto permitirá a los usuarios del nuevo reloj inteligente de Samsung Gear S2 3G, conectarse de forma segura a las redes celulares, permitiendo realizar llamadas de voz y datos a través de su conexión 3G.
Son pocos los relojes inteligentes que, hasta el momento, permiten las llamadas desde el mismo reloj y parece que este nuevo terminal de Samsung, el Gear S2, además de haber optado por un nuevo diseño minimalista y moderno, también se ha lanzado al mundo de la conectividad 3G con una versión especial.
Tanto el Samsun Gear S2 como su versión 3G, el Gear S2 3G, cuentan con una pantalla circular de 1,4 pulgadas con resolución de 360×360 pixeles y un grosor de 11,4mm. En cuanto a la memoria, ambas versiones cuentan con 512MB de RAM, 4GB de almacenamiento. La conectividad Wi-Fi (802.11n) y Bluetooth 4.1, junto con un procesador de dos núcleos de 1.0Ghz y una nueva batería de 250mAh (en el casdo del Gear S2) y de 300mAh (en el caso del Gear S2 3G ), que promete ofrecer hasta dos o tres días de uso. Ambos son resistentes al polvo y al agua, se cargan de forma inalámbrica y cuentan con sensor de ritmo cardíaco, sensor de luz ambiental, barometro y acelerómetro.
El Gear S2 no ejecutará Android Wear, sino que continuará utilizando el sistema desarrollado por Samsung y conocido como Tizen, eso sí, contará con una nueva versión que correrá por primera vez en un terminal con forma circular. Los terminales Gear S2 permitirán visualizar notificaciones del calendario, emails, noticias, llamadas y notificaciones de otras Apps que estén instaladas en los terminales. Además, la versión con 3G permite una mayor autonomía para que el reloj no tenga que depender tanto de la conexión del celular para realizar sus funciones.
Hasta el momento los terminales wearables de Samsung únicamente eran compatibles con teléfonos de la misma compañía, pero este nuevo Gear S2 permitirá conectarse a otros teléfonos inteligentes que ejecute Android 4.4 o superior y que, al menos, cuenten con 1.5GB de RAM.
Gemalto colabora en la plataforma Samsung Pay
Una de las novedades de este wearable es que ha sido el primer reloj en incorporar tecnología NFC, lo que permitirá el pago móvil a través del reloj mediante Samsung Pay, la plataforma en la que Gemalto ha colaborado con Samsung para aplicar innovadoras soluciones como Allynis TSH.
Esta solución de Gemalto proporciona una conexión única que ofrece a los emisores de pago un camino acelerado para el lanzamiento de servicios de pagos móviles, integrando un enrolamiento de usuario optimizado, instalación del servicio y gestión del ciclo de vida de las credenciales de pago o servicios de tokenización. El proceso de incorporación para emisores de pago ha sido simplificado y se han evitado las nuevas inversiones en TI. La plataforma de pago de Samsung se beneficia de un elemento seguro integrado, dedicado para el almacenamiento de credenciales sensibles en todos sus terminales, mientras que el Allynis TSH se asegura de que los emisores de pago puedan beneficiarse de la máxima flexibilidad para futuros planes de trabajo.
Con todo y pese a la adquisición por parte de Samsung de LoopPay, que ha abierto la puerta a la tecnología magnética y que ya se encuentra en otros terminales de la compañía como el Samsung Galaxy Note 5 y la gama Galaxy S6 (S6, S6 Edge y S6 Edge+), el Gear S2 no contará con esta innovadora forma de pago magnético. Por este motivo, el sistema de pago móvil a través de este wearable solo se podrá hacer mediante tecnología NFC, que además – y según comenta la compañía – se espera que tenga otros usos aparte del pago móvil y que permita abrir puertas y controlar dispositivos electrónicos o electrodomésticos, ya que Samsung está trabajando con diferentes compañías para expandir el uso de NFC.
Impulsados por un estilo de vida más cómodo y conectado, el mercado de wearables espera que se excedan los 126 millones de unidades en 2019.