El concepto de Voz IP empieza a estar obsoleto y la telefonía cloud le pisa los talones. Gracias a este tipo de telefonía no habrá que cablear toda la oficina para tener una centralita, ni estaremos limitados a la hora de crear nuevos agentes y extensiones.
La telefonía cloud es un concepto similar al de la Voz IP, en realidad es un paso más allá que acaba con las centralitas físicas y aporta mayor flexibilidad, ahorro y análisis para las empresas. Tan solo el hecho de poder generar nuevas extensiones o agentes, que pueden situarse en el otro extremo del mundo y hacerlo de forma inmediata, ya supone una enorme ventaja para muchas grandes empresas que se ven obligadas a contratar una centralita en cada una de sus sedes. Además, la centralita cloud no pertenece a ninguna empresa de telefonía, sino que es propiedad de la empresa que la instala, lo que supone otra ventaja considerable.
La telefonía cloud utiliza la tecnología para proporcionar a los usuarios una serie de servicios que pasan por el almacenamiento de datos, el acceso a plataformas, el acceso a redes locales y un completo sistema de comunicación. Los teléfonos de VoIP, que se utilizan también para este tipo de telefonía, no transmiten la voz a través de la línea telefónica tradicional, sino que la digitalizan y la convierten en paquetes de datos que viajan a través de Internet. Si además de un teléfono VoIP, contamos con la telefonía cloud, el terminal tendrá acceso – a través de la nube – a todos los datos y aplicaciones almacenados en un servidor virtual. Esto supondrá una ventaja a la hora de cambiar de móvil, ya que los datos dejan de estar almacenados en el dispositivo como hasta ahora y quedan guardados en la nube, a la que accederemos desde el nuevo terminal.
Al igual que los usuarios pueden beneficiarse de un acceso completo a sus datos desde cualquier lugar, las empresas se benefician de centralitas cloud, sin necesidad de soporte físico, con la posibilidad de crecimiento, capacidad de gestionar las entradas, salidas y desvíos de llamadas o almacenar los avisos y, todo ello, siguiendo la programación realizada.
En definitiva, la telefonía cloud significará un importante ahorro en costes de instalación y un mayor control y análisis de los datos que almacenen los teléfonos en la nube.