A finales de 2019 los datos apuntaban que el digital workplace empezaba a estar en la agenda de un CIO que necesitaba dar respuesta a las necesidades de las empresas. 2020 ayudó a dar el empujón definitivo con el teletrabajo como necesidad y la obligatoriedad de contar con una tecnología que facilitara el trabajo en cualquier momento, desde cualquier dispositivo y lugar. Una transformación del puesto de trabajo que facilita a las organizaciones que lo implantan una mayor productividad de sus empleados, la retención del talento y una imagen de marca más potente.
¿Qué demandan las organizaciones y los usuarios en 2024? Un digital workplace seguro que aporte una gran experiencia de usuario. La multinacional alemana IGEL se está posicionando en el mercado con estas dos características como puntos fuertes pero también presentándose como la alternativa a Windows, con su sistema operativo propio basado en Línux.
Descubra en este whitepaper cuáles son sus ventajas y cómo IGEL puede ayudarle a proteger su endpoint del ransomware con sus soluciones.