Según un informe de Gartner, algunas de las iniciativas de TI sostenible más rentables tienen actualmente un índice de adopción inferior al 30 % por parte de las empresas. A pesar de estos datos, Kristin Moyer, vicepresidenta de análisis de Gartner, asegura que la adopción de tecnologías sostenibles “avanza a buen ritmo. Los directivos han completado, de media, nueve iniciativas de este tipo en áreas como los centros de datos, el cloud, el puesto de trabajo digital, los datos o el software”.
No obstante, Moyer reconoce que, a tenor de los patrones de adopción, “los ejecutivos no están implementando las iniciativas más rentables”.
Según el estudio, el 64 % de los directivos cree que los proveedores no les dan los datos sobre el rendimiento de las emisiones. «Debido a estas limitaciones, algunos tienen dificultades para priorizar las iniciativas de TI sostenibles o saber por dónde empezar”.
Aunque las dos áreas donde más iniciativas de TI sostenibles se están implementando en centro de datos (86 %) y puesto de trabajo digital (79 %), “hay proyectos más rentables que tienen una baja adopción en ambas categorías”.
En el caso de los centros de datos se incluyen el redimensionamiento del sistema de alimentación ininterrumpida (SAI) y la mejora de la refrigeración. «Los directivos deberían ajustar el tamaño de sus SAI en función de las necesidades de capacidad actuales y futuras, lo que contribuye a aumentar la eficiencia y el ahorro de costes», afirma Moyer. «Los sistemas de refrigeración mejorados, como la refrigeración por inmersión, la refrigeración pasiva y la refrigeración directa al chip, también están infrautilizados y pueden impulsar una reducción significativa del consumo de agua y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero».
En el lugar de trabajo, se está infrautilizando la circularidad en TI. Sólo el 22 % de los directivos encuestados están optando por comprar activos renovados para mejorar la circularidad, reducir los residuos y las emisiones de GEI.
Además, muchas organizaciones siguen renovando los dispositivos basándose en una vida útil prevista fija (de tres a cinco años), en lugar de utilizar análisis para determinar el momento óptimo para sustituir portátiles, PC y servidores. “Los directivos deberían utilizar los análisis de rendimiento de los dispositivos y la telemetría para sustituirlos cuando sea necesario”. Gartner estima que, para 2027, el PC como servicio alcanzará el 50 % de las adquisiciones de PC, frente al 20 % de 2023.