Durante la celebración de la edición número 34 del “Encuentro de economía digital y las telecomunicaciones”, llevado a cabo por la patronal tecnológica AMETIC, el discurso común de todos los representantes del Gobierno tuvo un eje común: el compromiso del Ejecutivo en torno a la reconstrucción económica, industrial y social de España tras la pandemia, afrontándola desde la transformación digital de la economía.
Nadia Calviño, vicepresidenta segunda y ministra de asuntos económicos y transformación digital, llamó la atención sobre un “mensaje” extraído de esta crisis: “la necesidad de una digitalización que permita la creación de nuevas empresas, que mantenga las que ya existen y cree empleo de calidad, participando en el crecimiento sostenible”.
Durante su intervención destacó los diez puntos de la agenda presentada en julio por el Gobierno, entre los que se encuentran la apuesta por el talento digital, acelerar la digitalización de la economía a través de macroproyectos tractores en sectores estratégicos o mejorar el atractivo de país como plataforma de empleo y trabajo, por poner algunos ejemplos.
El secretario de Estado de Telecomunicaciones avanzó los objetivos de la estrategia en la que el Gobierno ya está trabajando. Objetivos que pasan por aumentar la conectividad para todo el territorio español, reforzar el liderazgo de España en el 5G y mejorar el atractivo del país como punto de referencia global del sector audiovisual.
Industria digital
Reyes Maroto, ministra de industria, comercio y turismo, abogó por el papel que la industria digital está jugando en la recuperación económica y social. Una recuperación a la que sin duda ayudará la aportación de los fondos europeos que, recordó, van a triplicar la inversión en mecanismos de investigación digital.
Maroto señaló, además, el interés del Ejecutivo en seguir apoyando al sector para garantizar la digitalización de las empresas, prestando especial atención a las pymes. Porque, tal y como subrayó, “es necesario contar con un ecosistema industrial fuerte para mantener las cadenas de valor y la resiliencia de la economía del país”. Pero hizo un llamamiento para alcanzar esa digitalización: “hay que corregir el déficit de las habilidades digitales para aprovechar la ventaja de ser el primer país de la UE y el tercero de la OCDE en redes de telecomunicaciones”.
La estrategia de digitalización para 2025 en España se centrará, según la ministra, en dar apoyo individualizado y un contexto adecuado a las empresas” para alcanzar el objetivo marcado por la Comisión Europea de aumentar el peso de las economías digitales hasta el 20 % del total de la economía”. Y todo ello junto a un llamamiento: la necesidad de ampliar la colaboración público-privada para alcanzar el éxito para la digitalización.
Por todo ello, Carme Artigas, secretaria de Estado de digitalización e inteligencia artificial, considera que en España se está llevando a cabo una revolución ya que, además de las acciones ya mencionadas, se están desarrollando otras como el Plan Acelera PYME, la apuesta por la ciberseguridad, con León como sede del Centro Europeo de Ciberseguridad, y el Radar COVID en el ámbito de la salud.
Formación
De formación habló Isabel Celaá, ministra de educación y formación profesional, quien recordó la importancia que tiene la educación en las habilidades digitales y tecnológicas, claves en la recuperación industrial, económica y social de España.
Celaá apuntó los tres ejes de desarrollo que se han puesto en marcha : el reconocimiento de acreditación de competencias profesionales, la mejora de la accesibilidad a FP o la incorporación de la digitalización a todos los programas, con un módulo de digitalización aplicada a cada sector productivo”, que permitirá a 3,3 millones de trabajadores acreditar su experiencia profesional, habilitará 200.000 nuevas plazas, en colaboración con las comunidades autónomas, en los próximos cuatro años (60.000 en el nuevo curso que comienza) y la creación de un módulo de digitalización.
Por su parte Pedro Mier, presidente de AMETIC, aseguró que los empresarios están acostumbrados a las crisis y esta es una oportunidad para la reconstrucción, aplicando una óptica a largo plazo.
En su opinión, el empleo tendría que ser el primer objetivo del plan de reconstrucción y ha trasladado las inquietudes tanto de la patronal tecnológica como del sector tecnológico en general, que desean una reconstrucción basada en un plan de formación profesional en habilidades digitales para todo el país; proyectos atractivos para motivar talento local y que atraiga talento internacional; un entorno legal estable que posibilite la contratación y la flexibilidad necesaria; y, sobre todo, la existencia de una demanda inteligente y de calidad”. Todo ello sin olvidar “un gran esfuerzo público-privado de innovación”.