El Gobierno de España va a movilizar 150 millones de euros para potenciar la integración y uso de la IA en las empresas españolas. Así lo ha anunciado Pedro Sánchez durante su intervención en la clausura del acto “HispanIA: cómo la inteligencia artificial mejorará nuestro futuro”, celebrado en la sede de la Fundación Ramón Areces, en Madrid.
“La historia nos ha mostrado que las tecnologías no generan prosperidad por sí solas. De hecho, tienden a reforzar el statu quo. A dar más poder a los poderosos y a hacer más ricos a los ricos”, ha señalado Pedro Sánchez, quien también ha asegurado que es necesario “tener una visión, una idea clara y compartida de qué clase de IA queremos y de qué rol queremos que ocupe en nuestra sociedad”.
Durante su intervención, Sánchez ha destacado que el objetivo del Ejecutivo es continuar esta legislatura reforzando las capacidades en computación e infraestructuras digitales, avanzando hacia “un sistema de datos integrado que facilite su intercambio y uso entre diferentes actores e impulsando la investigación científica y el desarrollo tecnológico de IA”. Por ello, ha anunciado la publicación y disponibilidad para todos los usuarios de los primeros modelos de ALIA, una nueva familia de modelos de inteligencia artificial diseñados específicamente para el español y las lenguas cooficiales. Esta iniciativa busca impulsar la investigación en el campo de la IA y desarrollar soluciones tecnológicas adaptadas a nuestro idioma. ALIA ya se está implementando en proyectos piloto como un chatbot para la Agencia Tributaria y una herramienta de diagnóstico médico para detectar insuficiencias cardíacas. Estos primeros pasos demuestran el potencial de ALIA para transformar diversos sectores y mejorar la eficiencia de los servicios públicos.
Además, también ha anunciado que se van a movilizar 150 millones de euros para potenciar la integración y uso de la IA en las empresas españolas. De ellos, próximamente se destinarán 20 millones a 500 casos de uso en pequeñas y medianas empresas, cuyos resultados y experiencias serán accesibles a todo el tejido de pymes, y “servirán para hacer de ellas un ecosistema más innovador y competitivo”.
En su intervención, Pedro Sánchez ha incidido en que la inteligencia artificial, a pesar de su gran potencial, presenta aún numerosas limitaciones y sesgos. Si bien existen capacidades humanas intrínsecas, como la empatía y la conciencia, que difícilmente serán replicadas por máquinas, la IA está revolucionando múltiples sectores y condicionará el futuro de nuestras sociedades. Para Sánchez es fundamental que España se posicione como líder en este campo, a pesar de los desafíos, y adopte una gobernanza adecuada para aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece esta tecnología transformadora.
La “buena noticia”, ha dicho, es que España parte de una “posición adecuada” para lograr ambas cosas al disponer de “uno de los ecosistemas de ciberseguridad más avanzados del mundo y de una de las mejores redes de infraestructuras digitales”. A ello se suma que la mayoría de la población posee habilidades digitales básicas, y el 40 % de las empresas grandes y el 8 % de las pymes ya han empezado a incorporar la IA en sus negocios, muy por encima de la media europea. “España también está bien posicionada para ser un actor global en el debate sobre la gobernanza de la IA”, ha enfatizado.
Según Pedro Sánchez, España, como el reto de países occidentales, tiene una “gran tarea por delante”, que pasa por acelerar la modernización del tejido productivo, fortalecer su estado de bienestar, avanzar hacia la sostenibilidad ambiental, al tiempo que reduce la desigualad y combatir las injusticias sociales. “Creo en el progreso, estoy convencido de que es posible y la IA puede ser una herramienta decisiva para lograrlo”, ha añadido. Sin caer en el “tecno-optimismo”, ha citado cinco “enormes ganancias” que podría reportar la IA a España como sociedad. Así, ha indicado que la IA ayudará a ser «más eficientes” y a incrementar la productividad, automatizando tareas, creando empleos de más calidad y bienes y servicios de alto valor añadido.
La IA puede generar ahorros significativos en el sector público. En el ámbito sanitario, se estima que la IA podría reducir el tiempo dedicado a tareas administrativas en hasta 5 consultas diarias por médico, y disminuir las listas de espera en especialidades hospitalarias en un promedio de 22 días. En educación, la automatización de tareas burocráticas podría liberar a los profesores un día completo a la semana. Asimismo, la IA puede optimizar la gestión de la energía, contribuyendo a la sostenibilidad ambiental. “La IA nos ayudará a defendernos. A hacer nuestros sistemas de ciberseguridad y defensa más robustos y fiables, algo crucial en esta nueva etapa geopolítica en la que empezamos a entrar”, ha añadido Pedro Sánchez, quien ha indicado que España usará la IA para vigilar sus fronteras, proteger sus infraestructuras críticas, anticipar amenazas, detectar patrones delictivos y estimar el riesgo en casos de violencia de género. También para optimizar procesos como el control aduanero, la gestión de emergencias por desastres naturales, o la lucha contra el terrorismo internacional.