España se ha convertido en los últimos años en un referente para la actividad logística a nivel europeo. Esto se debe principalmente, según apuntan expertos de Proequity, a nuestra posición geográfica estratégica, nuestra infraestructura de transporte avanzada y nuestro compromiso con la innovación tecnológica en logística.
Como señalan desde Proequity, además de la ubicación geográfica de España, nuestro país cuenta con muy buenas conexiones marítimas y aéreas que la convierten en una puerta de entrada clave para el comercio internacional. Además, de contar con alguno de los puertos más transitados de Europa, nuestro país tiene una completa red de carreteras y ferrocarriles que facilitan el transporte de mercancías a nivel nacional e internacional.
Para los expertos de Proequity, otra clave que ha permitido que España sea el hub logístico que es, ha sido el impulso en innovación y nuevas soluciones, con el refuerzo de la inversión por parte de compañías privadas y entidades públicas en nuevas tecnologías y sistemas avanzados que han mejorado la eficiencia y la sostenibilidad de la cadena de suministro.
Según Proequity, el mercado español está a la cabeza en la implementación de nuevas tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, el blockchain, big data o el internet de las cosas. Estas innovaciones están transformando la manera en que las naves y compañías dedicadas a la logística y supply chain gestionan sus operaciones logísticas, mejorando la eficiencia, reduciendo los costes y confirmando la seguridad del empleado.
Como señala David Martínez, CEO de Proequity, “la actividad logística en España ha experimentado grandes avances para lograr posicionarse a la cabeza en comparación con otros países europeos, convirtiéndose así en un hub logístico europeo, atrayendo a nuevas compañías e inversores para nuevos proyectos”. A pesar de está buena situación desde la compañía recomiendan mantenerse atentos al contexto actual, como explica Martínez, “lo cierto es que, a pesar del buen funcionamiento del sector, la actual situación de conflictos internacionales e inflación puede hacer ralentizar la creación de nuevos proyectos”.
Por el momento los datos llevan al optimismo, en 2022, según Proequity, el sector acumuló más de 2.300 millones de euros de volumen de inversión, con Madrid y Barcelona como líderes del mercado con alrededor de 1,3 millones y 760.000 metros cuadrados respectivamente. Además, se detectó un crecimiento de la actividad en otras zonas, impulsándose en provincias como Málaga, Sevilla o Zaragoza.