La división cloud de Amazon: Amazon Web Services, permite a desarrolladores y empresas construir aplicaciones diferenciales y escalables. Entre sus usuarios figuran desde startups hasta grandes figuras del mundo enterprise y entre sus partners integradores y compañías que van creando sus propios productos como Teradata, Microsoft o Cisco, por poner algunos ejemplos.
Entre sus grandes logros su liderazgo en IaaS, destaca Carlos Sanchiz, sr. solutions arquitect de AWS, gracias a que en los últimos diez años han construido una completa infraestructura en el mundo de la computación, la analítica y el almacenamiento.
Recientemente la compañía se ha dado cuenta de que, a pesar de que han ido lanzando soluciones de migración masiva de datos, estas se han quedado cortas, por lo que han apostado por AWS Snowmobile, con el fin de facilitar la migración a través de un camión contenedor con capacidad para transportar hasta 100 petabytes de datos. El camión cuenta con conexiones de fibra para mover la información de manera rápida desde las instalaciones del cliente hasta los datacenters de Amazon. Desde allí se suben a la nube de Amazon Web Services.
Ideal para migraciones masivas, el cliente consigue, entre otros beneficios, un gran ahorro de tiempo (de 26 años de la manera tradicional a seis meses con AWS). Una solución muy apropiada para la gran banca, por poner un ejemplo.
Snowball Edge es otra de sus apuestas. También especializado en la migración masiva de datos pero a menor escala, hasta 100 TB, permite hacer clusters de información.
En cuanto a sus servicios orientados a introducir las capacidades de AWS en dispositivos externos, Carlos Sanchiz apunta a que empresas como Qualcomm, Intel, Philips o Endesa están haciendo que sus dispositivos trabajen con el software Greengrass de Amazon, embebiéndolo dentro de sus dispositivos.