La innovación es crucial para que una empresa pueda tener éxito de forma continuada. Ayuda a crear productos nuevos, mejores y más rápidos para los clientes y, además, permite potenciar la creatividad dentro de la empresa. Es imprescindible contar con la tecnología como pilar fundamental para evolucionar. Aquellos que se niegan a innovar (en lo que respecta a la tecnología y a la mentalidad) tendrán dificultades para seguir siendo relevantes en un mercado cada vez más competitivo.
El data center actual es un ejemplo especialmente significativo en este caso. Proporciona los elementos necesarios para aprovechar las tecnologías de un futuro cada vez más conectado. Estos data centers avanzados dan acceso a los responsables de la toma de decisiones a componentes como la virtualización, el almacenamiento flexible y las ventajas ofrecidas por la nube. A su vez, esto les permite ser innovadores, puesto que se pueden centrar en las operaciones de negocio y preocuparse menos de los elementos básicos del hardware utilizado. Esto resulta clave para cualquier empresa que quiera animar a las partes interesadas a adoptar “el mantra” de la empresa permanentemente activa (Always-On).
Sin embargo, una empresa no puede limitarse a colocar los cimientos en su lugar y esperar a que los cambios ocurran de inmediato. De hecho, empresas en todo el mundo siguen dudando a la hora de adoptar nuevas prácticas innovadoras relacionadas con la tecnología a pesar de tener que competir en un mercado cada vez más globalizado. El informe sobre disponibilidad de datos (Data Center Availability Report) de Veeam mostró que, aunque el 81 % de las empresas están modernizando su data center para hacer frente a las crecientes demandas de acceso 24X7 a los servicios y aplicaciones TI, prácticamente una quinta parte de las mismas sigue empeñada en usar métodos antiguos y obsoletos. En gran medida, esta resistencia se debe al gran número de normas y reglamentos que es necesario cumplir. Las empresas deberían ser conscientes de que estas normas sirven de guía para adoptar el cambio tecnológico. Al animar a las empresas a cumplir con los requisitos de protección de la información y con un buen gobierno corporativo, los responsables de la toma de decisiones pueden examinar de manera minuciosa los procesos y las estructuras internas existentes y ver dónde se puede desarrollar la innovación.
Esto no significa que una actualización del diseño de nuevas soluciones aplicadas a los sistemas tradicionales vaya a proporcionar de manera instantánea una solución sustancial. Lo ideal sería que las empresas quisieran diseñar y construir algo desde la base. Este enfoque requiere que se lleven a cabo cambios en los sistemas que utilizan la tecnología más antigua. ¿Acaso hay mayor justificación a la hora de impulsar el cambio y la modernización que un escenario en el que una empresa puede perder oportunidades de aumentar ingresos debido a la tecnología con la que ya cuentan?
Cambiar los sistemas puede ser costoso, lo que fomenta la falta de interés de algunas empresas que no quieren abandonar los sistemas tradicionales y obsoletos. El cambio es un proceso más sencillo de adoptar cuando una empresa trabaja con proveedores que adaptan su enfoque comercial al desarrollo de soluciones innovadoras para que sus clientes puedan afrontar retos empresariales. Las empresas necesitan soluciones que estén disponibles y sean a accesibles a los empleados, especialmente si tenemos en cuenta que la cultura actual del comercio online se ha convertido en un negocio permanentemente activo (Always-On).
Aquellos que adopten el modelo de empresa permanentemente activa (Always-On) trabajarán cada vez más con proveedores de servicios que se convertirán en asesores de confianza por sus destrezas técnicas y visión a la hora de integrar soluciones en las prácticas comerciales ya existentes. La relación de la empresa con los proveedores permitirá superar los retos, dado que estos pueden tener acceso a un listado preseleccionado de distribuidores en múltiples sectores. El outsourcing es beneficioso porque los costes externos se reparten a lo largo de un periodo de tiempo, puesto que los servicios solo se utilizan cuando son necesarios.
La externalización también es beneficiosa en momentos de cambios tecnológicos frecuentes La tecnología evoluciona a un ritmo exponencial, lo que significa que muchas empresas no pueden permitirse el lujo de adoptar y ajustarse a los cambios. En lugar de sopesar los puntos a favor o en contra de un proveedor comparándolo con el resto, es más útil comprender de qué manera se pueden combinar todos los puntos fuertes de los distintos proveedores. Esto significa que las empresas deberían sacar partido del modo en el que las soluciones de diversos proveedores pueden beneficiar a sus prácticas comerciales.
Las empresas deben comprender que, además de diferentes sistemas y procesos, también pueden aprovechar los datos existentes. Se ha hablado mucho sobre la explosión de datos en el entorno empresarial, pero aún no somos completamente conscientes de la inteligencia significativa que se puede extraer de ellos. Esto es esencial para aportar significado comercial a los datos. Un proveedor de servicios de confianza con las capacidades adecuadas puede estructurar los datos, simplificando el proceso para la empresa.
Los responsables de la toma de decisiones deberían analizar con atención la tecnología y los sistemas que tienen, para así determinar dónde debe producirse el cambio y si dicho cambio requiere un enfoque hecho a medida o una renovación en profundidad. Sin embargo, no cabe duda de que las empresas no pueden dormirse en los laureles. El cambio es algo natural y debe producirse. Contar con un conocimiento exhaustivo y complejo del entorno tecnológico (o trabajar con socios y proveedores que lo tengan) abre la puerta a beneficios en forma de ingresos potenciales a través de la innovación y transformación.
Alexis de Pablos, director técnico de Veeam Software Iberia.