Teradata ha destacado las tres prioridades que toda empresa debe tener en cuenta si quiere tener éxito.
Para implementar tanto estrategias de big data como analíticas avanzadas, es necesario contar con un plan empresarial. Sin embargo, gran parte de las compañías se saltan el primer paso: definir cómo los datos, analíticas, herramientas de primera línea y personas se unen para generar valor de negocio. Contar con una estrategia proporciona un lenguaje común que permite a los ejecutivos senior, profesionales tecnológicos, data scientists y managers discutir sobre qué les proporcionará un mayor beneficio y, lo que es más importante, elegir dónde y cómo comenzar. Estas son las prioridades fundamentales para tener éxito en la implementación:
Alinear las prioridades de inversión con la estrategia de negocio
La integración de los datos a través de transacciones, operaciones e interacciones con los clientes, proporciona grandes ideas, pero el coste de una nueva arquitectura de datos y el desarrollo nuevos modelos y herramientas puede llegar a ser inmenso. Por ello es fundamental que exista un claro compromiso por parte del equipo senior para establecer las prioridades.
Equilibrar la rapidez en la implementación, el coste y el proceso de aprobación
Una vez que las prioridades de inversión están establecidas, no es difícil encontrar un proveedor de software y analítica empresarial que ofrezca aplicaciones y modelos algorítmicos que permitan abordar el plan. Estos paquetes pueden resultar más rentables y ser más sencillos y rápidos de instalar que desarrollarlos internamente, sin embargo, a menudo carecen de las cualidades de una gran aplicación, una que esté basada en casos reales de negocio y pueda motivar a los managers. Por eso, es fundamental que la planificación contemple un equilibrio entre la necesidad de ser rentables y la rapidez y la necesidad de combinar el enfoque en datos y la creación de modelos que reflejen la realidad empresarial.
Enfoque centrado en el compromiso y las capacidades
La labor de involucrar a todos los activos de la empresa comienza con la creación de modelos analíticos que los managers de primera línea puedan entender. Estos modelos deben estar vinculados a herramientas sencillas que les ayuden a tomar decisiones y a procesos que les permitan aplicar su propia experiencia. Aunque algunos enfoques analíticos, como la previsión básica de ventas, son automáticos y casi no requieren que los managers se involucren, el proceso fallará si no cuenta con su apoyo, por eso la participación de los directivos es fundamental.
“La esencia de un buen plan estratégico es que resalta las decisiones más importantes que la empresa debe llevar a cabo y define las iniciativas que se deben priorizar, como aumentar los márgenes o tener un crecimiento rápido”, aseguran Stefan Biesdorf, Director de McKinsey en Munich y Martin Willcox, Director de Producto y Soluciones de Marketing International en Teradata Corporation. “Las empresas deben abordar cuestiones análogas: escoger los datos internos y externos para integrarlos, seleccionar los modelos analíticos y herramientas que mejor respalden los objetivos de negocio y desarrollar las capacidades necesarias para aprovechar este potencial”.