La búsqueda de soluciones sostenibles para la computación de alto rendimiento (HPC) está impulsando la innovación en el sector TI y trae consigo beneficios tanto medioambientales como económicos. La revolución que suponen los cambios tecnológicos, el aumento del uso de la IA, el incremento de los costes energéticos y las preocupaciones climáticas han provocado un cambio en las prioridades de la comunidad de HPC que ahora se dirigen a la eficiencia energética.
La computación de alto rendimiento puede consumir cantidades considerables de energía, lo que representa una barrera para su adopción por parte de muchas empresas. Según un informe de Dell publicado en 2023, el 58% de los centros de datos de HPC se vieron afectados por el impacto de los costes energéticos en las operaciones empresariales, lo que pone de manifiesto que las empresas tienen que optimizar el consumo de energía sin sacrificar el rendimiento.
Cómo lograr que la HPC se enfoque en la eficiencia energética
Uno de los principales desafíos desde el punto de vista del uso de la energía es mantener refrigerados los servidores que alimentan la HPC. En este contexto, se están explorando nuevas soluciones de refrigeración para reducir el calor generado por estas máquinas. La refrigeración líquida está ganando terreno por su capacidad para disipar el calor con mayor eficiencia que los sistemas tradicionales de refrigeración por aire. Según un informe de Allied Market Research, se espera que el mercado mundial de refrigeración líquida alcance los 6.150 millones de dólares en 2027.
Los avances en software también están desempeñando un papel fundamental para hacer que la HPC sea más sostenible. Los algoritmos inteligentes de gestión y optimización de las cargas de trabajo se utilizan para distribuir las tareas informáticas de forma eficaz, reduciendo el consumo de energía y ampliando la vida útil del hardware.
Garantizar que la infraestructura esté consolidada y configurada para un rendimiento óptimo es otro de los factores clave para acelerar las iniciativas de sostenibilidad.
La integración de fuentes de energía renovables en los centros de datos es otro requisito importante para lograr un futuro más verde. La Agencia Europea de Medio Ambiente ha reconocido que la sostenibilidad dentro de la HPC desempeña un papel crucial en el objetivo de la Unión Europea de lograr la neutralidad de carbono para 2050. Al adoptar la energía solar, eólica e hidroeléctrica, la HPC puede compensar sus necesidades energéticas.
Reciclaje de residuos electrónicos para acelerar la economía circular
Si bien los sistemas HPC suelen tener una larga vida útil, las actualizaciones y mejoras del sistema pueden generar posibles desechos electrónicos.
En 2022 la humanidad generó 62 millones de toneladas de desechos electrónicos, según datos del cuarto Informe Mundial de Residuos Electrónicos de las Naciones Unidas. Según este informe, la generación anual de desechos electrónicos aumenta 2,6 millones de toneladas al año en todo el mundo y va camino de alcanzar los 82 millones de toneladas anuales en 2030. En concreto, en España, cada ciudadano generó 19,6 kg de estos residuos en un año, dos kilos por encima de la media europea.
Ante esta situación, la gestión responsable de los residuos electrónicos es crucial, por lo que las iniciativas de reciclaje y reacondicionamiento están ganando terreno.
La IA es un factor clave para lograr una HPC sostenible
Las soluciones sostenibles para la HPC deben ir más allá del hardware y la infraestructura para incluir los algoritmos que las impulsan. El machine learning y los algoritmos de IA a menudo requieren amplios recursos computacionales, lo que lleva a los investigadores a explorar técnicas como la compresión de modelos para reducir los requisitos computacionales de los modelos de IA sin que afecte a su precisión.
Las iniciativas que promueven el uso de la IA para mejorar la sostenibilidad ambiental general también han aumentado, desde la optimización de las redes energéticas hasta la supervisión y la gestión de los recursos naturales.
En definitiva, el sector de la computación de alto rendimiento se está transformando con el fin de lograr la eficiencia energética sin comprometer el rendimiento. Esto trae consigo iniciativas sostenibles que están sentando las bases para un futuro más resiliente de la informática en EMEA, que impulsará la innovación en toda la región durante las próximas décadas.
Óscar Rivas
Manager solutions architect de Dell Technologies