El sector de las telecomunicaciones en España soporta una carga tributaria del 6,6 %. Una cifra que lo sitúa como el país de la Unión Europea con los mayores impuestos sobre este sector. Además, a esta carga se suman otras propias de dicho ámbito, como la financiación de la producción audiovisual y el servicio público universal. Todo esto provoca una mayor diferencia con el resto de Europa, ya que la fiscalidad de las empresas se eleva al 6,7 %.
Estos datos se reflejan en el informe sobre “La fiscalidad del sector de las telecomunicaciones”, realizado por EY para la Asociación Española para la Digitalización (DigitalES). En dicho estudio se aboga por un marco normativo e institucional justo y equilibrado con el objetivo de impulsar la inversión y la innovación, así como la competitividad de las empresas españolas y crear riqueza y empleo con un nivel de presión fiscal adecuado.
“El sector telco se ha revelado como fundamental para nuestro país en los últimos meses y es clave para la recuperación en los próximos años”, ha comentado Eduardo Serra, presidente de DigitalES. Asimismo, ha explicado que “en un entorno fiscal discriminatorio y desproporcionado, las inversiones necesarias se ven lastradas”, hecho que no permitirá a las empresas ser competitivos ni motor de la economía.
Serra también ha asegurado que “el sector se encuentra en clara asimetría respecto a otros y tiene derecho a operar en un escenario en el que se mantengan las mismas reglas de juego para todos, con una fiscalidad que no dañe el desarrollo digital del país”. Que como ha recordado es el “eje fundamental de la recuperación que proponen desde Europa y el Gobierno de España”.
La situación entre los vecinos europeos
Y es que España posee los tipos más elevados en la mayoría de los conceptos impositivos, pero también es el país que más figuras impositivas tiene reguladas. Esto provoca que el sector de las telecomunicaciones español sea el que mayores cargas tributarias soporta en comparación con Alemania, Francia, Italia y Reino Unido. En todos estos países la presión fiscal es inferior a pesa de que el sector supone un mayor porcentaje del PIB.
El resultado de estas elevadas cargas tributarias hace que el nivel de ganancias medias del sector sea del 0,92 % del PIB en el período 2010-2019. Una cifra que está por debajo de la media europea (1,05 %) y del resto de países que se han analizado en el informe.