La falta de profesionales con competencias tecnológicas adecuadas ha generado una brecha entre las ofertas de empleo del sector TIC y los trabajadores demandantes de empleo con el perfil adecuado para cubrirlas. DigitalEs ha analizado esta brecha y los factores que han generado este déficit de perfiles con las competencias tecnológicas adecuadas para acceder al mercado de trabajo en el informe “Anatomía de la brecha de talento tecnológico” para el que ha contado con colaboración de Capgemini, HP, InfoJobs y Overlap.
El estudio, que fue presentado en un acto que abrió Federico Linares, presidente de DigitalES, refleja los problemas a los que se enfrentan las empresas y los candidatos a la hora de cubrir los puestos de trabajo vacantes en el sector TIC que la asociación estima que ascienden a 120.000. Linares señaló que este desfase limita el crecimiento. A su juicio “las tecnologías emergentes no han nacido en España, pero si creamos un ecosistema correcto podemos recoger grandes frutos en el futuro”. La colaboración público-privada es uno de los elementos que DigitalES considera que es fundamental para cerrar esta brecha.
Para el presidente del Consejo Económico y Social, Antón Costas, lo más importante con este estudio es que los datos permiten arrojar luz sobre este problema. “Lo que no se mide no mide empeora y lo que se mide se puede mejorar”, subrayó. El presidente del CES abogó por la alfabetización digital básica como medio para impulsar el desarrollo económico. Defendió la Formación Profesional Dual como el medio para emparejar a los demandantes de empleo con las vacantes ofertadas. Y subrayó que hay que sustituir la captación de talento que tiene un matiz negativo relacionado con el “robo” de talento por formar talento. En ese sentido, recalcó que las empresas tienen que desarrollar el talento que tienen todas las personas y evitar un discurso elitista y excluyente. “Hay que evitar hacer un discurso elitista porque es una injusticia social y un desperdicio de talento”.
Datos principales
El informe revela que el número de especialistas TIC en España debe de aumentar en más de 1,39 millones para cumplir con los objetivos de la Década Digital de la Comisión Europea. Uno de los problemas que se observan es el tiempo que se tarda en producir la contratación desde la publicación de la oferta. Si la media general asciende a 12 semanas en el caso de una vacante de perfil TI asciende a 18 semanas.
La tasa de empleabilidad TIC es del 85 % en España, pero sigue por debajo de la media europea que es del 92 %. También se observa una brecha de género porque todavía el 70 % de los empleados TIC son hombres. Otro problema es que muchas profesiones todavía no están identificadas. Y, además, hay una brecha regional porque el 52 % de las ofertas se encuentran en Madrid, el 16 % en Cataluña y el 7 % en Andalucía.
En cuanto a la formación, solo el 25 % de los profesionales hacen uso de los programas formativos y, además, la edad media de los trabajadores es de 44 años, lo que revela la necesidad de reciclaje y formación continua.
Esta falta programas de capacitación se agudiza en el caso de las pymes ya que solo el 17 % tiene programas de formación continua.
Estos indicadores revelan que la formación es la clave para la empleabilidad y que la orientación es una de las claves para que se produzca no solo en las etapas iniciales sino también a lo largo de toda la vida profesional.
Antonio Rubio, director de I+D+i de Overlap, detalló algunas de las conclusiones del informe como que son necesarios más datos para hacer un análisis prescriptivo, que no se fomenta la formación tecnológica en la educación básica y que se detectado una brecha del esfuerzo, lo que lleva a descartar los estudios STEM por ser más difíciles. Por tanto, es necesario la orientación y la formación de los orientadores para que sepan responder a esta situación y mejorar la accesibilidad al sistema educativo y realizar un esfuerzo conjunto de toda la sociedad.
Entre las recomendaciones que se desprenden del análisis figuran la mejora de la orientación profesional, la consolidación de la formación dual, el fomento de la formación continua a través de microcredenciales y microcréditos, la creación de programas de específicos enfocados a la tecnología para las artes y las humanidades y la creación de un “Observatorio publico privado para el empleo tecnológico”.
Formación profesional dual y nuevas tecnologías
Durante toda la presentación del informe se resaltó la importancia de la Formación Profesional dual para cerrar esta brecha y como el mejor medio para adecuar la oferta a la demanda de profesionales. Clara Sanz, secretaria general de Formación Profesional, y Miguel Ángel Turrado, director general de HP SCDS, mantuvieron un diálogo en el que se expusieron las claves del éxito de este modelo.
Sanz comentó que el nuevo sistema de la FP da respuesta a todas las necesidades. Explicó que más de 1,1 millones de alumnos la han cursado y que, además, se ha logrado multiplicar por dos el número de trabajadores que se están formando.
La secretaria general de Formación Profesional también recalcó que es un modelo de futuro que ponen de ejemplo la Comisión Europea y la Unesco, aunque señaló también que es importante la colaboración público privada para su éxito. “El sistema de FP no puede ser útil si no cuenta con las empresas. Toda la nueva formación profesional va a ser ya dual, lo que requiere un compromiso y esfuerzo por parte de las empresas para ofertar plazas suficientes para todos los estudiantes, e invertir en futuro”, añadió.
En este punto también insistió Luis Acebedo, director general de FUNDAE, quién resaltó que el desajuste es fruto de las condiciones económicas y está vinculado a las condiciones laborales. “Estamos observando un cambio de modelo en el que las empresas van generando su propio conocimiento a través de patentes, credenciales, etc. Tenemos que trabajar para que ese conocimiento sea también permeable al resto de la sociedad”, añadió.
Durante la presentación también se habló de la irrupción de las tecnologías emergentes como la IA y el papel que puede jugar para mejorar la formación. En este sentido, Óscar Codón, director general de Fundación Capgemini, señaló que “es crucial que la IA ayude especialmente a la digitalización de los sectores de población más desfavorecidos o con mayor riesgo de quedarse retrasados”.
Por su parte, Clara Bassols, directora de la Fundación Bertelsmann, señaló que la IA puede ser una herramienta para mejorar el aprendizaje.