Un tribunal federal de Estados Unidos ha declarado inválidos los aranceles impuestos por la Administración Trump, una medida que afectaba a productos importados de varios países y que había generado incertidumbre en numerosos sectores, especialmente en el tecnológico. Según informa Reuters, la resolución judicial considera que estos aranceles excedían la autoridad presidencial, abriendo la puerta a un posible cambio en las políticas comerciales vigentes.
Los aranceles anulados incluían gravámenes del 25 % sobre importaciones procedentes de Canadá y México, un 10 % sobre productos chinos y otros impuestos adicionales sobre componentes tecnológicos europeos, como los semiconductores. Forbes señala que estas medidas habían encarecido la cadena de suministro de las empresas tecnológicas, elevando los costes de producción y afectando a fabricantes de dispositivos electrónicos, proveedores de servicios en la nube y compañías de inteligencia artificial.
La eliminación de estos gravámenes representa un alivio para el sector, que podrá reducir costes y mejorar su competitividad en un momento de fuertes tensiones comerciales globales. Empresas como Apple y otras grandes tecnológicas habían sufrido caídas en su valor de mercado debido a la incertidumbre provocada por estas políticas arancelarias, por lo que la decisión judicial ha sido recibida con optimismo por parte de los inversores.
No obstante, según indica The Economic Times, esta no es una victoria definitiva, ya que la administración estadounidense podría recurrir la sentencia y reintroducir estas medidas en el futuro. Además, las restricciones comerciales con países como China en sectores estratégicos como el de los semiconductores siguen vigentes, lo que mantiene la atención sobre la evolución de las políticas comerciales internacionales.
La anulación de los aranceles abre una ventana de oportunidad para que el sector tecnológico reconfigure sus estrategias de suministro y producción, pero también pone de relieve la necesidad de estar atentos a los cambios regulatorios que puedan afectar al comercio global y a la estabilidad del mercado tecnológico.