IBM presenta su plan para construir el primer ordenador cuántico a gran escala, tolerante a fallos: IBM Quantum Starling. El dispositivo, previsto para 2029, se construirá en un nuevo centro de datos cuántico de IBM en Poughkeepsie, Nueva York, y promete revolucionar la computación cuántica con capacidades que superarán en 20.000 veces las operaciones de los ordenadores cuánticos actuales. Desde IBM, Arvind Krishna, presidente y CEO de la compañía, señala que la empresa está trazando la próxima frontera de la computación cuántica y que su experiencia en matemáticas, física e ingeniería allana el camino hacia un ordenador cuántico a gran escala, tolerante a fallos, capaz de resolver desafíos del mundo real, abriendo enormes posibilidades para las empresas.
El desarrollo de IBM Quantum Starling forma parte de una nueva hoja de ruta de desarrollo cuántico, publicada por IBM, que establece un plan viable para crear sistemas cuánticos con cientos o miles de qubits lógicos (unidades que integran múltiples qubits físicos y corrigen errores para mantener la fidelidad de la información cuántica). Este avance es crucial ya que la corrección de errores es fundamental para que los ordenadores cuánticos ejecuten algoritmos complejos, sin fallos. IBM detalla cómo su arquitectura tolerante a fallos utilizará códigos de corrección de errores innovadores denominados qLDPC, que reducen hasta en un 90 % el número de qubits físicos necesarios, superando las limitaciones técnicas de otras propuestas.
Antes de la llegada de Starling, IBM lanzará varios procesadores cuánticos. entre ellos Quantum Loon en 2025, diseñado para probar componentes esenciales del código qLDPC y nuevas conexiones internas entre qubits. Quantum Kookaburra, previsto para el año que viene, será el primer procesador modular que integrará memoria cuántica con operaciones lógicas base para sistemas escalables. Completará la oferta Quantum Cockatoo, en 2027, que unirá dos módulos Kookaburra para formar sistemas mayores sin necesidad de fabricar chips de gran tamaño.
Los ordenadores cuánticos a gran escala, como IBM Quantum Starling, prometen acelerar significativamente procesos en áreas como el desarrollo de fármacos o el descubrimiento de materiales química y optimización, con un ahorro notable de tiempo y costos Starling también ejecutará 100 millones de operaciones cuánticas con 200 qubits lógicos, mientras su sucesor IBM Blue Jay, diseñado para alcanzar 1.000 millones de operaciones, con más de dos mil qubits lógicos, ampliará en mayor medida el horizonte de la computación cuántica.