La inteligencia artificial generativa (GenAI) ya ha transformado radicalmente la forma en que trabajamos, consumimos y operamos en el mundo digital. Sin embargo, la verdadera revolución apenas comienza con la llegada de la IA Agentic, una tecnología que promete llevar la automatización y la toma de decisiones a un nivel sin precedentes. Según los datos de Gartner, en 2028, el 33 % de los softwares empresariales incluirán esta nueva generación de IA, frente a menos del 1 % en 2024. Y se espera que al menos 15 decisiones cotidianas se tomen de forma autónoma con el uso de esta nueva tecnología.

Un nuevo paradigma que lleva a la IA a la acción
A diferencia de la GenAI, que se centra en la generación de contenido e ideas, la IA Agentic permite «actuar» en lugar de limitarse a «pensar». Esta nueva inteligencia con capacidad de acción combina las capacidades generales de la IA con la inteligencia específica del sector, ofreciendo acciones y soluciones a medida para cualquier tipo de industria en la que se desarrolle. De esta forma, allana el camino para aplicaciones basadas en IA de propósito general más avanzadas y versátiles en campos como la automatización, los servicios personalizados y los sistemas inteligentes.
Estos nuevos sistemas no solo establecen objetivos y toman decisiones complejas, sino que también se ajustan dinámicamente a entornos cambiantes basándose en la información que reciben, demostrando un nivel de autonomía más cercano al humano. Por otro lado, sus marcos de inferencia escalables y sin servidor permiten ceñirse a las distintas cargas de trabajo, reduciendo los costes globales de infraestructura y aumentando y reduciendo la escala durante los picos de tráfico.
Cabe resaltar que esta nueva generación de IA optimiza las operaciones sin comprometer la confidencialidad de los datos, gracias al despliegue de agentes personalizados y la integración de bases de datos vectoriales para evitar que los datos confidenciales lleguen a la Internet pública. Por eso facilita la adopción en sectores altamente regulados como son el industrial, la sanidad o las finanzas. En este contexto, Europa lidera su desarrollo gracias a marcos regulatorios como el GDPR y la Ley de IA de la UE, que garantizan un enfoque centrado en la privacidad de los datos y el cumplimiento normativo. De esta forma, esta tecnología impulsa la innovación mientras cumple con los más altos estándares regulatorios y mejora el rendimiento de las organizaciones.
Los desafíos que enfrentan las empresas
Sin embargo, la transición hacia la IA Agentic no está exenta de desafíos. La adopción de esta tecnología exige un cambio estructural en las organizaciones, desde la actualización de infraestructuras hasta la capacitación de la fuerza laboral para trabajar junto a sistemas inteligentes.
Actualmente la mayoría de las empresas no están preparadas para implementar la IA Agentic (e incluso la GenAI) porque no disponen de la infraestructura de escalabilidad de IA adecuada para la inferencia de IA en el edge. Al acercar la inteligencia y la toma de decisiones al lugar donde se generan los datos, la inferencia en el edge permite a las organizaciones lograr operaciones más rápidas, eficientes y respetuosas con la privacidad. Además, el costo de implementación y mantenimiento podría representar otro obstáculo, especialmente para aquellas que no cuentan con una estrategia clara de IA. Aquí es donde los proveedores de nube independientes entran en la conversación.
Según un estudio de S&P Global Market Intelligence (encargado por Vultr), el 85 % de las empresas ya están migrando sus cargas de trabajo de IA en el edge para acercar la inteligencia artificial al punto donde se generan los datos y más del 80 % de los profesionales de IA y TI esperan aumentar estas operaciones en el próximo año. Para la mayoría de las empresas, la adopción de la IA Agentic ya representa un cambio de paradigma fundamental. A medida que esta tecnología avanza, los requisitos de inferencia en el edge aumentarán exponencialmente, lo que exigirá a las organizaciones una arquitectura robusta y la capacidad de desplegar infraestructura, modelos, agentes y aplicaciones de IA en entornos periféricos a un nivel sin precedentes.
Otro desafío está relacionado con las diferencias regulatorias entre regiones que podrían generar una brecha en la velocidad de adopción y aplicación de la IA Agentic. Mientras Europa se enfoca en dar prioridad a la soberanía de los datos y el cumplimiento y así garantizar un desarrollo seguro, Estados Unidos podría beneficiarse de una implementación más rápida, gracias a una regulación más flexible en comparación con el viejo continente. Como resultado, las industrias estadounidenses podrían consolidarse como líderes en la nueva “era de la inteligencia” impulsada por la IA Agentic, aprovechándola rápidamente para aumentar la productividad industrial y avanzar en las aplicaciones sectoriales específicas en entornos reales.
Sin duda, la IA Agentic no es solo una evolución tecnológica sino que está marcando el comienzo de una nueva era de inteligencia operativa. Y como dicen algunos expertos, en los próximos años habrá más agentes de IA que humanos en el planeta. Así que a medida que la IA Agentic se convierte en la columna vertebral de las industrias, las empresas que adopten esta transformación no sólo impulsarán una mayor eficiencia, sino que desbloquearán formas totalmente nuevas de innovar y prosperar. La cuestión ya no es si adoptar o no estos agentes de IA, sino con qué rapidez las empresas pueden aprovechar su potencial para seguir siendo competitivas en un mundo cada vez más automatizado.
Kevin Cochrane
Chief marketing officer en Vultr