La adopción de la inteligencia artificial combinada con el Internet de las Cosas (AIoT) avanza con fuerza en empresas industriales y energéticas, según un el estudio de IDC “How AIoT Is reshaping industrial efficiency, security, and decision-making”, encargado por SAS. Informe que revela que un 62 % de las compañías a nivel global ya utilizan AIoT, mientras un 31 % planea incorporarla próximamente.
El mantenimiento predictivo se ha convertido en la aplicación estrella, con casi un 71 % de adopción para anticipar fallos y reducir paradas no planificadas. Le siguen la automatización de IT (53 %) y la optimización del suministro y la logística (47 %). Los beneficios también empiezan a ser tangibles: el 54 % espera importantes ahorros de costes, el 52 % confía en acelerar la innovación, y el 49 % proyecta una optimización operativa significativa.
Pero el avance no está exento de retos. Las compañías señalan la integración de sistemas heredados, la calidad de los datos, la brecha de habilidades y el alto coste de implementación como los principales obstáculos. Aun así, las organizaciones que hacen un uso intensivo de la tecnología duplican la probabilidad de obtener beneficios respecto a aquellas con una adopción moderada, y menos del 3 % afirma que el valor no cumple con lo esperado. Europa, en consecuencia, mantiene una visión positiva sobre el potencial de la AIoT.
El sector industrial también atraviesa una etapa marcada por interrupciones en la cadena de suministro, riesgos de seguridad y escasez de personal. Para responder, las empresas están acelerando la transformación digital y adoptando tecnologías emergentes como la AIoT. La automatización de fábricas se perfila ya como uno de los cambios más visibles.
El estudio destaca especialmente el potencial de la AIoT en el sector eléctrico y energético. El análisis avanzado de datos permite predecir la demanda, optimizar operaciones, gestionar gastos y reforzar las estrategias de sostenibilidad. Además, la IA ayuda a que profesionales con distintos niveles de especialización puedan interactuar con los datos y tomar decisiones mejor fundamentadas, desde operarios de planta hasta equipos estratégicos.
La combinación de IA e IoT también amplía el valor de las infraestructuras existentes y transforma la fuerza laboral, sustituyendo la supervisión manual por una orquestación inteligente.
Kathy Lange, research director de IDC en AI Software, subraya que “los usuarios que hacen un uso intenso de AIoT son casi dos veces más propensos a recibir unos beneficios que superan las expectativas. Esta tecnología está impulsando la innovación, optimizando las operaciones y facilitando que la toma de decisiones sea más inteligente y rápida”.
Jason Mann, vicepresidente de IoT en SAS, señala que “cuanto más utilizan las empresas la AIoT, mayores son los beneficios que obtienen”, y anticipa que la adopción continuará creciendo a medida que las compañías experimenten mayor eficiencia, productividad y ahorro, ya sea en mantenimiento predictivo, operaciones fabriles o redes eléctricas.










