La digitalización ha supuesto una explosión en la cantidad de datos que se generan y que tiene que gestionar las empresas. Desde Denodo consideran que la transición lógica que deben asumir las compañías es pasar de las arquitecturas de datos centralizadas que están llegando a sus límites, a la apuesta por la virtualización de datos, que permite integrar los datos distribuidos a lo largo de la empresa.
En realidad, como subrayan desde Denodo esta transición está en los planes del 60 % de las grandes empresas que, según el Gartner Market Guide, tienen pensado implementar la virtualización de datos como método clave en su arquitectura de integración de datos antes de que finalice el año.
En palabras de José Andrés García, responsable para Iberia y Latinoamérica de Denodo, “la gestión del dato es imprescindible para llevar a cabo cualquier estrategia de negocio y, por ello, son cada vez más las empresas que están implementando la virtualización de datos, ya que les permite optimizar el tiempo, los costes y los procesos”.
Entre las principales ventajas que ofrece la virtualización de datos destaca el ahorro. Según cálculos de Denodo, las empresas pueden ahorrar un 30 % de los costes operativos y un 50 % del tiempo y del espacio de almacenamiento, si emplean la virtualización de datos frente a otros métodos tradicionales de integración.
Además, las plataformas de gestión de datos actuales, como explican desde Denodo han simplificado mucho las consultas. En la actualidad, estas soluciones permiten reescribir las solicitudes de manera que se procesen en el origen de los datos eliminando la necesidad de mover los datos a través del sistema. Esto mejora enormemente el rendimiento de las consultas complejas que se pueden realizar de una manera más rápida y eficaz. Asimismo, otro plus que ofrece la virtualización de datos frente a otros métodos es la capacidad de conectar los datos de cualquier fuente, en una única capa de datos para toda la empresa.
Y, por último, desde Denodo destacan el papel que juegan los controles y filtros con los que cuentan las plataformas de virtualización, que permiten regular el acceso y restringir las solicitudes de sus empleados, lo que garantiza que las compañías conserven el control total sobre sus datos.