Ametic ha expresado su preocupación por la presión existente sobre los Estados miembros de la UE para que se comprometan con un calendario para alcanzar un acuerdo sobre la Propuesta de Reglamento general de protección de datos, cuestión que se debate en el Consejo de Ministros de la UE. La patronal tecnológica española entiende que “los debates no están lo suficientemente avanzados, por lo que respecta a varios aspectos clave, como para que se alcance dicho acuerdo en estos momentos”.
Ametic ha trasladado esta inquietud por carta con idéntico contenido dirigida a distintos responsables de la Administración Española (Ministro de Justicia, Dirección General de Cooperación Jurídica Internacional, Ministerio de Industria, Secretaria de Estado para la Sociedad de la Información, Ministerio de Economía y Competitividad, Secretaria de Estado de Comercio, Oficina Económica del Presidente del Gobierno y Agencia Española de Protección de Datos), a los que intenta hacer ver que “la reforma del marco de protección de datos de la UE podría ser uno de los logros políticos más importantes de la era digital. Un conjunto armonizado de normas de protección de datos en los 28 Estados miembros de la UE crearía un verdadero mercado único digital para las empresas españolas; facilitaría las actividades de las empresas, más allá de sus fronteras nacionales y al mismo tiempo daría a las empresas europeas acceso a los mercados en rápido crecimiento, de fuera de la UE; permitiría a las pequeñas y medianas empresas beneficiarse de las economías de escala y rentabilidad que ofrecen las tecnologías basadas en Internet, así como proporcionar una mayor seguridad jurídica a los ciudadanos al saber que, en todos los mercados europeos, se aplica una única ley”.
Pero al tiempo, Ametic subraya especialmente que “sólo con un Reglamento sólido, equilibrado y con visión de futuro se fijará un estándar que seguirán otros países a lo largo y ancho del mundo”. En su misiva, la patronal tecnológica española dice que “lamentablemente, creemos que las propuestas actuales no alcanzan todavía ese nivel, ya que se basan en soluciones inviables, que podrían en riesgo el ecosistema digital y que no ofrecen unos derechos o medidas de protección reales a los ciudadanos españoles. Muchas de las disposiciones conllevarían un aumento de los trámites burocráticos y pondrían en peligro la competitividad de las empresas europeas. Las normas deben lograr el debido equilibrio entre las medidas de protección de la privacidad y las posibilidades de las tecnologías digitales o se correrá el riesgo de minar los cimientos de la innovación de la economía digital europea”.
Ametic que ve precipitado un acuerdo en la materia, señala que “nos preocuparía enormemente que cualquier compromiso político, sobre una fecha límite para el acuerdo, cerrase el debate de cuestiones fundamentales del Reglamento”.
Y, concretamente, dice que se precisa más tiempo para desarrollar planteamientos viables del Reglamento que:
- Apliquen un enfoque basado en los riesgos, como reconocer el contexto y el riesgo en la definición de los datos personales.
- Adopten un sistema útil de “ventanilla única” y simplifiquen las disposiciones del establecimiento principal, para facilitar la aplicación efectiva de las nuevas normas de protección de datos, tanto para empresas como consumidores.
- Limiten el requisito de autorización expresa a situaciones verdaderamente de riesgo.
- Aseguren un libre flujo de los datos, más allá de las fronteras internacionales, a fin de garantizar que las empresas españolas tengan acceso a los mercados en rápido crecimiento, de fuera de la UE.
La asociación española que aglutina en su seno a Empresas de la Electrónica, las Tecnologías de la Información y Comunicación, de las Telecomunicaciones y de los Contenidos Digitales se pronuncia favor de “un debate constructivo para el que hay que tomarse tiempo, especialmente cuando se trata de un Reglamento complejo que, por definición, tendrá que adoptarse inmediatamente en la enorme variedad de modelos de negocio de 28 países. El enfoque del Consejo ha sido, hasta la fecha, el correcto: deliberaciones meditadas y calculadas que ´tienen en cuenta los intereses de los ciudadanos y las empresas, especialmente las pymes´”.
Ametic confía en que las autoridades españolas prestarán la atención necesaria a lo que se les expone y en consecuencia hagan valer estos argumentos ante la UE a fin de que el debate sobre x se desarrolle de una forma pausada, meditada y consensuada a fin de que el resultado sea “un reglamento sólido, equilibrado y con visión de futuro”