España se posiciona cada vez mejor en el mapa de interconexión del sur de Europa. Así lo demuestra el último estudio encargado por De-CIX, EllaLink e Interxion a Telegeography. Un estudio en el que se analiza cómo la expansión de los centros de datos, la creciente presencia de operadores en la nube, los nuevos cables submarinos y los puntos de intercambio están convirtiendo a la Península Ibérica en un ecosistema de interconexión estratégico.
Madrid y Barcelona se muestran como un destino clave de interconexión. Ambas han experimentado un gran crecimiento en el ancho de banda. Barcelona con un 35 % desde 2016. Madrid un 18 %. La capital de España, además, presenta un índice de actividad muy elevado en cuanto a número de centro de datos, con el 25 % de este tipo de infraestructura con respecto al resto de ciudades analizadas en el estudio. Y 98.000 metros cuadrados de espacio para colocation con 14 datacenter, además de tres regiones de nube previstas con Azure, AWS y Google Cloud. Algo que nos sitúa por delante de Portugal.
La ciudad condal, por su parte, abrirá un nuevo punto de interconexión de datos por parte de De-CIX y cuenta con tres importantes proveedores de centros de datos para atender la demanda local.
Desde Interxion, Raquel Figueruelo, su directora de marketing, resalta los puntos positivos de nuestro país no solo por ser la cuarta economía de la UE, también por la gran calidad de nuestra red demostrada durante la pandemia. Y, aunque destaca inversiones como la de EllaLink que nos está conectando internacionalmente, haciendo que Madrid esté a menos de seis milisegundos de cualquier punto de España, convirtiéndonos en el nodo de interconexión de los cables submarinos, también señala la importancia de Barcelona con seis proyectos de cable submarino en los que se está evaluando su amarre para conectarnos con Marsella o África. De esta manera Barcelona se convierte en una alternativa a Marsella, el nodo de amarre de cables submarinos del sur de Europa.
Figueruelo defiende que al ser el PIB español igual que el de Londres nos correspondería tener la misma capacidad de centros de datos.
En el apartado de las inversiones en España, revela el gran incremento de las mismas, incluido Interxion que está construyendo su cuarto centro de datos con una inversión de 230 millones y 30 megavatios. Pero, aunque considera importante esta inversión, señala que la Península Ibérica necesita 1.700 millones de inversión para ser el hub del sur de Europa, por lo que es necesario que la Administración Pública agilice las licencias para la construcción de los centros de datos y simplifique los procesos. Que se promocione la región para atraer inversiones. Y que la economía digital se desarrolle.
Por último, recalcó que gracias a infraestructuras como los cables submarinos somos capaces de llegar a Sudamérica en 65 milisegundos, aunque, en su opinión, lo fundamental es que la Península Ibérica se está convirtiendo en un emisor de servicios digitales. “Nuestra balanza comercial de servicios digitales hasta hace cinco años era una balanza deficitaria. Solo importábamos este tipo de servicios. Hoy estamos en las condiciones ideales para ser emisor de servicios digitales y ser, de verdad, exportadores de digitalización”.