El Día Mundial del wifi se celebra el 20 de junio, una jornada dedicada a resaltar el papel que juega esta tecnología inalámbrica y de qué manera ha transformado la forma en la que trabajamos, estudiamos o socializamos los ciudadanos. Para las empresas también ha supuesto un antes y un después.
Javier Aguilera, director general de Ikusi, recuerda que “las redes wifi proporcionan la libertad de estar conectados, permitiendo trabajar, aprender y disfrutar del entretenimiento en cualquier lugar. Sin embargo, esta libertad solo se alcanza plenamente cuando las conexiones son seguras y confiables”.
Ikusi otorga una importancia capital al propio diseño de la arquitectura de la red inalámbrica, es decir, la planificación y el diseño de la infraestructura de redes que permite la conectividad inalámbrica. “Un diseño que en el caso de Ikusi, parte de un profundo conocimiento de las arquitecturas, de las tecnologías y de las necesidades del propio cliente”.
Si hablamos de beneficios y desafíos, el principal reto continúa siendo la seguridad, “y el temor a los ciberataques, de ahí que sea cada vez más necesario implementar protocolos de seguridad avanzados y mantenerse al día para proteger los datos empresariales”, recuerda Ikusi. En este sentido, las redes protegidas (con WPA2, por ejemplo) se consideren robustas dado que proporcionan muy buena seguridad. Las tendencias actuales indican un movimiento hacia la adopción de redes híbridas, que combinan elementos de redes cableadas e inalámbricas para ofrecer mayor flexibilidad y resiliencia.
En cuanto a las ventajas, al ser redes inalámbricas, la comodidad que ofrecen es muy superior a las redes cableadas, porque cualquiera que tenga acceso a la red puede conectarse desde distintos puntos dentro de un espacio lo bastante amplio. Y una vez configuradas, las redes Wi-Fi permiten el acceso de múltiples dispositivos sin ningún problema ni gasto en infraestructura ni gran cantidad de cables.