Uno de los proyectos de blockchain más ambiciosos, que se están desarrollando en nuestro país, tiene marca española: GeoDB. Y lo hace con una idea que algunas personas ya comenzaban a demandar: el pago por los datos de los usuarios de los que las empresas hacen uso. La compañía ha reconocido que el pago a las personas es lo más importante. Para ello destina el 70 % del número total de tokens del protocolo (más de 700.000.000) al sistema de incentivos y retribuciones.
Los datos son el objeto de deseo de todos. No en vano, según IDC, actualmente se generan más de 2,5 trillones de datos cada día y los ingresos generados por el mercado del big data alcanzarán los 251,8 millones de euros en España en 2019 y más de 50 mil millones en todo el mundo. Sin embargo, hasta la fecha, las empresas usaban nuestros datos sin que los usuarios recibiéramos ninguna prestación económica a cambio.
¿Cómo funcionará el pago por los datos?
GeoDB quiere construir un protocolo descentralizado que funcionará como un marketplace de datos, donde estén presentes tanto los usuarios que generan la información como las empresas que la necesitan. La compañía española desarrollará una plataforma autosuficiente donde se comprarán y venderán los datos de forma segura, justa y ordenada gracias al uso de la tecnología blockchain, aseguran sus dirigentes.
Luis Gelado, su fundador y CEO, añade que en GeoDB han encontrado la forma de resolver ciertos problemas actuales del mercado de big data y, al mismo tiempo, recompensar a los usuarios acercando la tecnología al día a día real de las personas.
Para beneficiarse del pago por el uso de sus datos, las personas solo tendrán que darse de alta en el marketplace a través de cualquiera de las apps de las empresas integrantes del protocolo o a través de GeoCash, una nueva app que lanzará próximamente GeoDB.
De momento la compañía ha firmado acuerdos de colaboración con diferentes empresas digitales para integrar este Marketplace que nacerá con una base de más de 12 millones de usuarios activos en 150 países, y está en conversaciones con sectores estratégicos como los de movilidad, sanidad, deporte, compraventa…
Los únicos datos que formarán parte del protocolo de GeoDB (y siempre con el consentimiento de la persona) serán datos fijos de los terminales como la marca, el modelo o el almacenamiento del teléfono del usuario y datos sobre su localización. El protocolo ejercerá de agregador de múltiples fuentes de información y aportará valor mediante herramientas de analítica avanzada.
Tras el registro y solo por formar parte del protocolo, las personas recibirán automáticamente un pago en forma de Tokens del protocolo, el GEO Token, que podrán utilizar para canjearlos por otros (Bitcoin, Ethereum, dólares) o para pagar directamente con ellos los propios servicios móviles que utilizan en su día a día. Además, la tecnología de GeoDB elimina la arbitrariedad a la hora de la retribución por el uso de los datos, ya que es el propio algoritmo de cálculo del protocolo el que calcula la retribución: cuanta más información venda un usuario, más alta será, reconocen desde la compañía.