La nube es una realidad de negocio. Angel Moreu, directora de cloud de IBM España, Portugal, Grecia e Israel, lo tiene claro. Las mayores necesidades que se requieren en el ámbito de la computación, como consecuencia de la tiranía del dato y de la “irrupción” de los sistemas cognitivos capaces de explotarlo y aprovecharlo de manera casi absoluta, han provocado la búsqueda de nuevas fórmulas para que el gasto no se dispare. “Y la nube ha sido la respuesta a estos altos requerimientos de computación”.
En el caso de IBM, la nube tiene un sabor híbrido. Una nube que ha generado en el gigante un negocio de 10.200 millones de dólares en 2015, lo que supone un crecimiento del 50 % en relación al año anterior. Un ascenso que parece que mantiene un ritmo parecido a lo largo de este año.
“Hay que movilizar la infraestructura”, recuerda Moreu ante la avalancha de datos y de dispositivos (y sensores) que los generan y que también quieren acceder a ellos. “La nube híbrida da respuesta a los nuevos modelos de negocio y al proceso de transformación digital”. El pasado año, la compañía presentó más de 65 nuevos servicios cloud y cuenta con una red de 48 centros cloud en todo el mundo, uno de ellos en Barcelona.
España va bien
A juicio de Moreu, la adopción de la nube híbrida en España no tiene nada que envidiar a la que exhiben otros países de su entorno. Recordó la capacidad “brutal” que tiene España en términos de emprendedores. “Y todos ellos han adoptado la nube como su entorno de trabajo natural”. En el lado de las empresas más tradicionales, la responsable reconoce que está en un proceso de migración hacia el cloud, “partiendo de la fórmula privada” y sobre todo la nube está presente “en aquellos proyectos que tienen que ver con la innovación, con fórmulas disruptivas o con el desarrollo de nuevos negocios”.
IBM ofrece un batería de servicios en la nube que incluyen desde la tradicional infraestructura física hasta los servidores virtuales, los servicios de seguridad y de conexión. Bluemix se presenta como la plataforma de innovación en la nube de IBM (PaaS), accesible para los desarrolladores; y SoftLayer es el nombre que recibe la apuesta de IBM en el campo del IaaS.
Decir sí a la nube
Ejemplos de esta adopción en España son startup españolas como Cabify, HIPRA, ODF y SetPay.
Cabify, la aplicación que permite contratar diferentes tipos de vehículos, con chófer, desde el dispositivo móvil, es usuaria de IBM Cloudant que le permite almacenar y gestionar en la nube el caudal de datos que genera. Alojada en la nube de IBM, la aplicación es accesible desde cualquier país en el que Cabify tiene presencia. Sam Lown, director de tecnología de la empresa, explica que la apuesta por la nube fue desde el primer momento. “Queríamos centrarnos en el negocio, no en la gestión de los datos; por ello apostamos por este modelo”.
El negocio de HIPRA está centrado en la vacunación animal. Desde el primer momento se dieron cuenta de la importancia que tiene certificar y monitorizar este proceso, debido a su repercusión en la productividad. Su colaboración con IBM parte de una solución de Internet de las cosas que está construida sobre la nube pública del gigante azul y que recoge y procesa los datos de un montón de granjas referentes a este asunto. “Utilizando la plataforma de IBM hemos reducido los costes”, destaca Joan Carles Pons, responsable tecnológico de la empresa.
ODF Energía se mueve en uno de los segmentos más tradicionales que existen en el mercado: la energía. Su idea de negocio era acelerar los procesos de venta de electricidad y de gas para las empresas. “El movimiento hacia la nube de IBM nos permitió lograr que la infraestructura se adaptara al crecimiento de nuestro negocio”, apunta Julio Sergio Palmero, consejero delegado de la empresa. Ante un panorama español en el que conviven 300 empresas que ofertan energía, se imponía la búsqueda de ventajas competitivas; algo que pasaba por una forma diferente de proponer las cosas. “La flexibilidad que te ofrecen las TI fue clave para lograrlo”. Palmero destaca, sobre todo, el coste de la nube. “Supone sin lugar a dudas un ahorro de costes”.
SetPay ha desarrollado un TPV móvil que permite a los comerciantes y autónomos gestionar sus pagos desde cualquier ubicación gracias al uso de un teléfono o tableta y un pequeño lector. El uso de la nube de IBM ha enriquecido con nuevas funciones a la plataforma. “Nos permite implantar nuevas características en nuestros productos e incluso pensar en la creación de nuevas opciones, gracias a Watson”, explica Xoan González, CTO de la empresa. “La nube tiene grandes ventajas en los tiempos de desarrollo y de producción”, relata. “Y te permite crecer rápidamente”.