La identidad física es única. Sin embargo, al hablar de identidad digital no ocurre lo mismo. Cada vez que un usuario abre un perfil en una red social o se registra en una plataforma cede una gran cantidad de datos, una información que es difícil de borrar ya que se encuentra fragmentada en distintas bases de datos que se convierten en puntos de identidad que no se conectan.
Por este motivo desde VU creen imprescindible que los usuarios puedan decidir quién accede a sus datos, cuándo y cómo. La compañía de ciberseguridad subraya la importancia de proteger lo que se conoce como online persona, es decir, todas esas identidades del mundo digital. “Para ello es importante abordar el futuro desde una perspectiva dinámica, apostando por implantar mecanismos de identificación descentralizados y autogestionados”, ha comentado Néstor Serravalle, CSO & VP de la compañía para Europa.
Para que las organizaciones puedan disponer de una estrategia integral de identidad digital unificada, VU cuenta con su solución (C)IAM (Customer Identity & Access Management). Se trata de una herramienta capaz de orquestar la validación de identidad, prueba de vida, registro, autenticación de usuarios y detección de fraude en tiempo real.
Además, gracias a (C)IAM las compañías pueden gestionar el ciclo de vida digital completo de los usuarios internos y externos mediante el control del onboarding, la validación biométrica y la prueba de vida, así como la comprobación de los factores de autenticación y la habilitación de los accesos. De esta manera se integran todos los controles en un único sistema.
