La evolución de la tecnología es absolutamente constante, así como la innovación y el crecimiento de la computación en nube. Y no hay perspectivas de que vaya a ralentizarse. Cada vez más organizaciones ven cómo la nube puede acelerar sus operaciones, su agilidad competitiva y su capacidad de innovación.
Las organizaciones que apuestan por la nube deben ver la correlación con la inversión en su personal. Aunque los planes operativos para 2023 se están evaluando minuciosamente a la luz de la incertidumbre económica, quienes inviertan en su personal —especialmente en estos tiempos— descubrirán que el rendimiento bien merece la inversión. Un estudio reciente de Forrester Research concluyó que las organizaciones que forman a su personal en competencias relacionadas con la nube consiguen un retorno de la inversión (ROI) del 100 % en seis meses, y del 234 % en tres años. Y las organizaciones que cuentan con una mano de obra con competencias digitales avanzadas están generando innovaciones (o productos y servicios) que elevan el producto interior bruto (PIB) mundial anual en unos 6,3 billones de USD al aumentar los ingresos y la productividad de los trabajadores. A medida que nos adentramos en 2023, observamos algunas señales claras de cómo la formación en competencias en la nube beneficiará a cualquier organización.
Inversiones en TI y competencias necesarias
Si tu organización ya ha dado el paso a la nube, o está pensando en hacerlo, es posible que estés experimentando los efectos de la escasez de talento con conocimientos avanzados en cloud. Hay cinco millones de puestos de trabajo en la nube sin cubrir, y las funciones de computación en la nube encabezan la lista de los puestos más difíciles de ocupar. La solución es centrarte en desarrollar las capacidades de tu plantilla actual. Según la Encuesta de Skillsoft sobre Habilidades y Salarios en TI en 2022, la computación en la nube encabeza la lista de inversiones, seguida de la ciberseguridad/seguridad de la información. Es lógico que reflejen la formación del personal a la que dan prioridad los directivos: seguridad, análisis de datos, herramientas para desarrolladores y operaciones de desarrollo.
Retener el talento avanzado en la nube invirtiendo en oportunidades de formación y certificación
Si la formación aún no figura en tu plan operativo para 2023, pregúntate si puedes permitirte el lujo de no hacerlo, en vista de la escasez de talento a escala mundial. La alternativa podría ser un periodo de espera más largo para cubrir vacantes, retrasos en la entrega de innovaciones e ineficiencias operativas. Haz que el objetivo de tu organización sea invertir en su principal activo: su personal. Ofrecer oportunidades para la formación en habilidades deriva en una mayor satisfacción y retención de los empleados. Además, si das un paso más y financias las tasas de los exámenes de certificación de tus empleados, es menos probable que estos busquen empleo en otro lugar.
Recurre a los jóvenes talentos para blindar tu organización de cara al futuro
Sabemos que cubrir tus carencias de habilidades no es tarea fácil, pero ponerse a ello podría ser una manera de aliviar la carga de trabajo de tu personal. Dado que los sueldos de los profesionales avanzados en la nube son cada vez más elevados, otro enfoque puede ser contratar a profesionales noveles. Estas personas poseen conocimientos básicos sobre la nube, además de certificaciones sectoriales, y están preparadas para asumir tareas de asistencia técnica, resolución de problemas, control de calidad, pruebas y corrección. Asignar a los recién contratados este tipo de tareas les ayuda a dominar el conjunto tecnológico general, les prepara para progresar en sus carreras y, en un plazo razonable, están listos para asumir tareas más complejas y desafiantes con el tiempo. Y ESG determinó que el 90% de las empresas que invirtieron en talento júnior han registrado un retorno de la inversión positivo. Los jóvenes talentos están motivados para aprender, son fáciles de formar y consiguen «tiempo de valor» en aproximadamente la mitad de tiempo que un experto contratado. En pocas palabras, el talento júnior puede ayudarte a innovar y aumentar los ingresos gracias a la nube, así como a retener el talento permanente.
Tanto los empleados como los directivos valoran las soluciones de aprendizaje integradas
Es de esperar que ahora estés estudiando tu presupuesto operativo para 2023 y reservando recursos para formar al personal. Pero, ¿dónde invertir? No busques más: la palabra mágica es formación virtual dirigida por un instructor (VILT). Antes de 2020, la mayor parte de la formación en directo se impartía presencialmente. Pero al cambiar el mundo laboral, también lo ha hecho la formación virtual, con enfoques sofisticados que mejoran la experiencia de aprendizaje en ausencia de un aula física. Tanto los alumnos como los directivos coinciden en que el formato VILT es extremadamente eficaz, aumenta la retención de conocimientos y es más económico, ya que elimina los gastos de desplazamiento. Por ello, la disponibilidad y el consumo de VILT aumentarán en los próximos 12-24 meses.
Las certificaciones siguen aportando valor añadido a la organización
Las certificaciones sectoriales te ayudan a distinguir el talento de alto calibre y, en 2023, veremos cómo más organizaciones invierten en reforzar su reserva invirtiendo en certificar a su personal. Según ESG, el personal certificado sitúa a la empresa en una posición competitiva más ventajosa. Tanto si tu compañía tiene previsto hacerlo como si ya invierte en ayudar a tus empleados a obtener la certificación —y considera favorablemente a los candidatos que poseen certificaciones sectoriales—, verás un impulso en la productividad, el potencial de innovación y la retención de empleados de tu organización.
Formación de empleados no tecnológicos
Con el crecimiento de la nube a otros departamentos más allá de TI, los directivos están potenciando cada vez más la fluidez en la nube a través de su compañía, desde finanzas a ventas, recursos humanos, marketing, e incluso el personal administrativo. Volkswagen, por ejemplo, invirtió en reforzar los conocimientos y competencias de sus empleados sobre la nube utilizando un marco centrado en ella. El resultado fue una reducción del tiempo de comercialización y una mejora de la colaboración entre equipos. «La Formación y Certificación de AWS nos ayudó a transformarnos como empresa al definir un camino en el que el negocio y la TI se acercaron y todos comprendieron la necesidad de ofrecer soluciones mejores y más rápidas a nuestros clientes», comentó Stefan Klünker, director de productos globales de Volkswagen Financial Services.
Da el siguiente paso
No importa en qué punto del proceso hacia la nube te encuentres: si estás apostando por ella, este es el año en el que debes impulsar las competencias de tu personal para afrontar el futuro con confianza.
Maureen Lonergan
Vicepresidenta de Formación y Certificación de AWS