A finales de 2022 IDC avanzaba en sus predicciones la importancia que la Web 3.0 iba a adquirir, marcando el camino de la economía digital. Eskimoz, agencia SEO especializada en posicionamiento natural, destaca de la misma que, aunque todavía no cuenta con fecha de lanzamiento, contará con una mayor privacidad de los datos y la exclusividad de la experiencia de cada usuario, si bien Maxence Marius, director general de la compañía en España, considera que del 80 % de las empresas españolas presentes en la red, no todas están preparadas para esta nueva generación.
De la Web 3.0 resalta que su característica principal residirá en la interconexión. El IoT y la compatibilidad de dispositivos potenciarán la personalización de la web en función de cada persona y las empresas tendrán que adaptarse a este nuevo panorama tecnológico para sobrevivir.
Big data e inteligencia artificial serán fundamentales para ella ya que habrá que gestionar un mayor número de datos. La IA permitirá que los sistemas se especialicen en cada usuario, encontrando las mejores coincidencias cada vez que se entre a la web, mejorando la UX.
Atrás quedará contar con varias identidades, en función del correo electrónico o el usuario en el que nos hayamos dado de alta en cada web. Todo quedará unificado, facilitando detalles como los procesos de compra, darse de alta en una plataforma o encontrar lo que se busca de manera más rápida, tal y como explica el directivo. Todo ello conseguirá hacer una web con una mayor capacidad de comprensión, parecida a la de un ser humano.
La Web 3.0 se organizará en una cadena de bloques, por lo que los datos tendrán como único propietario al usuario y no a las plataformas. Y la seguridad será un elemento decisivo al proteger en mayor medida los datos personales, gracias a la cadena de bloques que hace que el propietario de los datos sea el propio usuario.